Según un estudio de la UNESPA (Asociación Empresarial del Seguro), el 2017 cerró con la cota más alta en los últimos 7 años en golpes de chapa.
El año pasado se produjeron un total de 1,91 millones de accidentes leves de tráfico lo que supone un incremento interanual del 3,14%. Los accidentes de chapa y pintura son típicos del tráfico urbano por lo que generalmente en tiempos de crisis estas cifras decrecen. En tiempos de bonanza, las cifras repuntan.
En lo referente a nuestra comunidad, Euskadi es una de las tres comunidades donde la siniestralidad en relación al tamaño de su población es más baja junto con Aragón y Ceuta. Además, los golpes leves varían en función de la época del año y del día de la semana. En época de vacaciones se producen menos golpes de chapa y pintura ya que estos golpes son típicos del tráfico en ciudad. Así, agosto y diciembre se presentan como los meses con menos siniestros de este tipo.
En cuanto a los días de la semana, en Bizkaia los días de mayor siniestralidad son los viernes (134 golpes de media) y los lunes (124 golpes de media). Estos datos son un reflejo del comportamiento colectivo de la gente.
Si eres de los que te ha tocado sufrir un golpe de chapa estos días, recuerda acudir a tu taller de carrocería o taller mecánico para que el golpe no vaya a más. En Carrocerías San Ignacio, taller de coches Bilbao te asesoramos sobre el golpe de chapa sufrido.
Para este 2018, son muchas las expectativas centradas en la evolución de los coches autónomos. La forma de producir, comercializar y reparar los vehículos se verá afectada por la introducción de estos nuevos vehículos. La conectividad y la conducción autónoma son por tanto los grandes retos a los que tendrán que hacer frente los talleres mecánicos y en último término los conductores.
Uno de estos retos afectará especialmente a los talleres de carrocería ya que entre otras cosas la conducción autónoma supondrá una reducción de la siniestralidad. Sin embargo, la conducción autónoma incluso en su nivel superior no eliminar el factor humano del todo ya que siempre existe la posibilidad de pasar a manual.
Además de las posibles colisiones, todos los sistemas de ayuda a la conducción presentes en los vehículos de hoy en día montados tanto en carrocerías como en las lunas ya necesitan y necesitarán aun más de un mantenimiento y reparación.
Del mismo modo, los vehículos sean autónomos o no, no están libres de las inclemencias del tiempo por lo que tarde o temprano tendrán que visitar el taller de carrocería. Tampoco podrán evitar las ráfagas de viento responsables de la caída de objetos, los efectos del salitre, ni al inevitable paso del tiempo.
El coche autónomo reducirá la demanda de reparaciones de grandes colisiones, pero creará otro tipo de mantenimientos que serán el día a día de los talleres mecánicos. En Carrocerías San Ignacio, taller de coches de Bilbao, trabajamos día a día para estar preparados para todos estos cambios.